miércoles, 21 de enero de 2009

Capítulo XIV : Una raza de Gigantes pobló la Tierra


La Raza de los Gigantes

Las historias de hombres con estaturas superiores a la humana (1.80-2.15m), ha pasado del mito a la realidad. Encontramos en muchas literaturas antiguas los relatos de hombres con tallas superiores a los 3m de altura, no obstante, hasta hace algunas décadas no se fueron atando los cabos sobre este enigma. La ciencia convencional afirma hoy, que el hombre evolucionó paralelamente con una raza de "hobbits" y de "gigantes".

Evidencias arqueológicas:

Los gigantes de Lovelock.
En 1.911 se hallaron diversos restos humanos momificados de cabello pelirrojo en la cueva Lovelock, situada a unas 70 millas al noreste de la ciudad de Reno, en el estado de Nevada (EE.UU). En total, se hallaron unos 60 cuerpos, muchos de ellos momificados -como ya dijimos anteriormente- y gran cantidad de artefactos (esculturas de piedra, hueso y madera, realistas señuelos para cazar patos, todo tipo de cestería, etc.) que se consideran de los más antiguos encontrados en el Nuevo Mundo. Sorprende entre los hallazgos unos mocasines y sandalias excesivamente grandes.

Como primera peculiaridad de estos restos humanos, se descubrió que poseían una altura de entre 6,5 a 8 pies de alto (entre 2 a 2,5 metros) que es una altura muy infrecuente según la historia oficial para restos humanos en la antigüedad y hasta lo son para los seres humanos de los tiempos que corren actualmente.

Los científicos, como siempre pasa en estos casos extraños, se mostraron reticentes a estudiar estos restos, muchos de los cuales terminaron siendo tirados por los mineros locales. Dos arqueólogos fueron enviados a investigar estos restos en 1.911, uno de la Universidad de California y otro de New York. Más que desenterrar los restos, parecían más interesados en volver a enterrarlos, no sólo en el sentido físico del término, ya que tardaron 17 años en hacer públicos los hallazgos. Evitaron examinar los huesos y en uno de los momentos incluso insistieron en volver a enterrar uno de los esqueletos que habían desenterrado. En cambio, enfocaron sus investigaciones en los restos de cerámica, fragmentos de tejidos y objetos similares.

Los gigantes contra los indios paiutes.
Cuando fueron consultados, los indios Paiutes narraron que existían leyendas transmitidas desde tiempos inmemoriales sobre batallas que ellos tuvieron con unos gigantes blancos de pelo rojo que vivían en esa zona cuando la tribu de los Paiutes llegaron por primera vez al territorio de Nevada. Los Paiutes llamaban a este pueblo de gigantes blancos "Si-Te-Cah". Según ellos, estos hombres pelirrojos eran un pueblo guerrero y varias tribus indias se unieron para luchar juntos en una larga guerra contra ellos -se cuenta que pudo durar unos mil años-. En esas leyendas se describe como en esas batallas los Paiutes y sus aliados emboscaron y lucharon contra los gigantes blancos hasta que casi mataron a todos, menos unos pocos a los que forzaron a refugiarse en una cueva -que no es otra que la cueva Lovelock-. Según continua la leyenda de los Paiute, después de que hubieran rodeado a los supervivientes de los gigantes dentro de la cueva, ellos apilaron matorrales a la entrada de ella y le prendieron fuego. Los Paiute cuentan como mataron a todos los que intentaron salir de la cueva. Mantuvieron el fuego vivo hasta que todos los gigantes murieron asfixiados. Los Paiutes cuentan que los Si-Te-Cah vivían literalmente en un lago sobre el que se situaba, dominando, la cueva. Vivían en este lago para evitar los hostigamientos de los Indios por lo que sus casas estaban emplazadas sobre balsas construidas con una planta fibrosa acuática llamada tule, una especie de cáñamo. Esta planta "tule" ya no se encuentra en la zona, por lo que se cree que fue introducida por estos gigantes. La denominación de Si-Te-Cah significa: "comedores de tule". Los Paiutes y los pelirrojos de largas piernas no se llevaban demasiado bien. Los indios acusaban a los Si-Te-Cah de ser caníbales y por eso guerrearon contra ellos.

Gigantes cerca de Lovelock.
En 1.931 se descubrieron unos esqueletos en el lecho del lago Humboldt, lago próximo a la ciudad de Lovelock. El primero de esos dos esqueletos medía 8 pies y medio de alto (unos 2 metros y medio) y parecía haber sido envuelto en un tejido como de goma similar a la manera egipcia. El segundo esqueleto medía 10 pies de alto (¡3 metros de altura!). Esta noticia aparecía en el diario local "Review Miner" el 19 de Junio de 1.931.

Giganthopitecus.
Creer en gigantes rompe nuevamente los esquemas darvinistas, de manera que la "nueva hipótesis" que ha surgido sobre el llamado "Giganthopitecus" es que fue un simio gigante que posiblemente coexistió con el hombre, pero que en todo caso no encaja en lo absoluto en la escala evolutiva, y la historia nunca lo describe como un simio sino como un hombre.

Los gigantes de Australia.
Los Wandjinas u hombres de las figuras rupestres encontradas en Kimberley al noroeste de Australia, fueron descubiertas en el año 1.838, pero su fecha de datación solo se descubrió en 1.996 mostrando igual que las leyendas indígenas en cuanto a estos seres, que convivieron con gigantes de hasta 5 metros de altura, corroborado por el descubrimiento de hachas de mano, mazas, cuchillos y diversas herramientas con un peso de entre 5 y 16 Kg. Del mismo modo ya en 1.970 se descubrió una huella de un pie con forma humana de 59 centímetros de largo por 18 de ancho. Estas herramientas sólo pudieron ser creadas y usadas por seres con una fuerza y estatura el doble de la actual. La datación de las "grandes" herramientas descubiertas se fijó en unos 100.000 años y los restos fósiles humanos hallados se acercan a una antigüedad de 200.000 años.


Según cuenta la leyenda aborigen australiana, en tiempos remotos o " Tiempo de los Sueños", se libró una gran batalla en Uluru, cuando un pueblo llamado "los hombres serpiente venenosos" atacó para destruir a los pueblos de la zona, llamados "los hombres serpiente no venenosos"; pero Bulari, la Diosa madre de la Tierra, los venció creando una nube de gases letales. Los "hombres serpientes venenosos" que lograron sobrevivir, fueron encerrados (y según la leyenda, aun hoy día permanecen en ella) en una prisión bajo el Uluru, el punto más sagrado de toda la Australia aborigen, una enorme colina de granito de color cambiante, más conocido en la actualidad con el nombre de Ayer's Rock –tal como coincide la historia de escriba Enoc (bisabuelo de Noé)-.

Cráneos gigantes en los Museos.
Tenemos de estos cráneos, Mayas, Nazcas, Paracas y otros, que se guardan en los museos de sur América. Los guaqueros de la actualidad dicen encontrar fémures y canillas descomunales que les llaman la atención pero no guardan por no saber qué hacer con ellos y les dan el mismo trato que al resto de las osamentas que encuentran, dejarlas en sitio. La arqueología considera un hallazgo de este tipo como caso aislado y fenómeno esporádico de nuestra especie, pero poco a poco nos vamos dando cuenta que fueron muchos y en distintos lugares de América.

Pruebas en Méjico.
Fray Pedro Simón, capítulo. III: "...En las de Méjico, y no mas lejos de la ciudad que cuatro leguas, abriendo unas zanjas para los cimientos de una casa de campo que hicieron los padres de la compañía llamada de Jesús del Monte, se hallaron unos sepulcros y en ellos huesos de hombres tan grandes, que todos juzgaron ser de gigantes, porque excedían dos veces la grandeza de los hombres de ahora, y que una muela que sacaron era como un puño. Afirma el padre Acosta que la vio el año de 1.586. Y lo mismo dice el padre Torquemada se han hallado en muchas partes de la Nueva España;…".

Pruebas en Colombia.
En la Historia de la provincia de San Antonino de Fr Alonso de Zamora escribiendo sobre Guatavita en el capitulo XVII dice: "...Siendo cura Doctrinero de este pueblo el P. Presentado Fr. Pedro de Tovar mandó cavar la huerta de la casa de los Curas, para sembrar alguna hortaliza, y descubrieron una losa de piedra lisa, y le sucedió á la letra, lo que dice el Evangelio: pues cavando para sacar un tesoro, hallaron un sepulcro, y en él el cuerpo de un Gigante; aunque al mover los huesos se hicieron pedazos, es prueba, de que también hubieron Gigantes en este Reino, como en la Nueva España, Según lo superficial, que estaba el sepulcro, indica, que no sería de los que hubo antes del diluvio".

Más pruebas en Perú.
El Padre José de Artiaga en su Obra La extirpación de la idolatría en el Perú, dice en el capítulo II: "...Las Sierras nevadas que llaman Razu, o por síncopa Rao, o Ritri, que todo quiere decir nieve, y también a las casas de los Huaris, q' son los primeros pobladores de aquella tierra, que ellos dicen fueron Gigantes, y es cierto que en algunas partes lo fueron, y se halla huesos de deforme, y increíble grandeza, que quien no lo ve, ni los toca con las manos, no lo creerá, porque se muestra por la proporción de los huesos, haber sido tanto mayores que los hombres de ahora".

Capítulo X: "...En Huaylla Cayan estuvimos días el Cura, y yo, catequizando, y predicando.....Lleváronnos a la otra banda del pueblo cerca de un cuarto de legua, donde estaba una cueva muy grande, y en ella muchos difuntos gentiles, y entre ellos tres cuerpos de Gigantes de deformes cabezas, vestidos de Cumbi, aunque con el tiempo podrido. Éstos son los progenitores de todos los de este pueblo a quienes adoraban, y tenían en mucho, habían muchos rastros de sacrificios, los cuerpos, y ellos se quemaron, en el pueblo.".

Mt. Blanc Fossil Museum.
Consta entre otros muchos el descubrimiento del fémur de un gigante encontrado durante la construcción de una carretera en el sudeste de Turquía en 1.950.

Pruebas en China.
Tal vez, el caso más popular y reconocido científicamente sea el del «Gigante de Java», hallado en el sur de China, cuya antigüedad ronda los 300.000 años. En la porción meridional de la misma nación se encontraron restos de un humano semejante, poseedor de seis dedos en cada extremidad. Esta característica de la polidáctilia (número anormal de dedos en las extremidades) parece haber sido un patrón habitual en esta raza de hombres.

Otras pruebas en Norteamérica, Europa, Asia y África.
Un caso similar al anterior se dio en una gruta de Atyueca (ex Unión Soviética), donde se encontraron esqueletos de hombres que medían entre 2,80 y 3 metros, ellos también presentaban seis dígitos en manos y pies.

Otros casos que podemos nombrar repasando rápidamente los anales arqueológicos son las tumbas de Chenini, en Túnez, donde descansaban los restos de seres de 3 metros de alto; el sepulcro de Bradford, en Estados Unidos, hallado en 1.880, que almacenaba esqueletos de más de 2 metros de altura con extrañas prominencias en forma de cuernos que sobresalían por encima de los arcos ciliares; las huellas del cretácico en Glen Rose, Texas, que medían 54,61 por 13,97 centímetros, y que llamativamente, se hallaban junto a las huellas de un brontosauro; los jóvenes gigantes de Lixus, cuya altura a los 11 años promedio rondaba los 2,20 metros; y por último, los restos óseos en Garós, en el sistema montañoso de Urbasa, en Castilla, Medinaceli, León, Cantabria y otros lugares, todos pertenecientes a España.

Según los documentos, uno de los gigantes más grandes hallado, tenía un esqueleto de 5,18 metros de alto, y fue desenterrado en 1.956 en Gargayan, Filipinas. Cada uno de sus dientes incisivos, tenía cinco centímetros de ancho por quince de largo. Se estima que en vida, este hombre pudo haber alcanzado los 5,40 metros.

Pero no todo son restos biológicos. Algunos exploradores se han topado con herramientas con un tamaño nada discreto. A 6 km. de Safita (Siria) arqueólogos hallaron unas hachas de mano de 3,8 kg. de peso. En Marruecos se descubrieron picos de 32 x 22 cm. y 4,2 kg. de peso y hachas de dos filos de 8 kg.. Dadas las dimensiones de estas herramientas, sólo podrían haber sido manipuladas por seres de un porte extraordinario.

Los más grandes de la historia.
Maximinus Thrax Cesar de Roma (235-238 d.C.) – 2,59m
Goliat filisteo (1.000 a.C. aprox.) – 2,74m
Rey Og – 3,96m (Deuteronomio 3:11)
Gigante del Cantón de Lucerna, Francia (1.577 d.C.) – 5,94m
Gigante de Valence, Francia (1.456 d.C.) – 7,07m
Gigante de Chaumont, Francia (1.613 d.C.) – 7,77m
Gigante de Cártagos (200-600 a.C.) – 10.97m

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Evidencias literarias:

Los Aztecas.
Los aztecas creían igual que los mayas, en diferentes sucesiones del fin del mundo, por ejemplo, la última fue hace en el 3.125 a.C. –correspondiente con el Diluvio bíblico y babilónico- y el próximo es en el año 2.012. Según una de sus historias, una de estas edades fue la de "Naui Ocelot": La primera edad que estaba precedida por Tezcatlipoca, en la cual vivían Gigantes que fueron eventualmente devorados por cosas semejantes a Jaguares, en esta edad se creía que el Sol estaba solo a la mitad de su Brillo. Esta edad duró 676 Años.

Los Nórdicos.
La cultura del norte de Europa es extensamente amplia en cuanto a relatos de razas de hombres gigantes, de ahí encontramos por ejemplo la mitología que habla de la creación del Universo por mano del gigante Ymir, la personificación del océano helado, y la vaca gigante Audhumla, de cuyas ubres brotaban cuatro chorros de leche. Audhumla, buscando ávidamente su alimento, lamió un bloque de hielo y, fundiéndolo, con su lengua, hizo aparecer el buen dios Buri, enterrado desde tiempo inmemorial en los hielos perpetuos.

Los Griegos.
La mitología griega habla de la estirpe nacida de la unión del "cielo" (Urano) y la "Tierra" (Gaia) entre las que destacan los primeros gigantes (griego: "titanis") como Cronos, Iapeto, Océano, Rea, Ceo y Casiopea. Así como de otros seres enormes como Tifón, Hestia, Hipnos y Tánatos.

La Biblia.
La salida de Israel de tierra de Egipto (1.500 a.C.) fue sorprendida a la hora de entrar a la tierra de promisión, cuando encontraron a una raza de gigantes que habitaba filistea. Hubo guerras durante muchos años contra ellos, principalmente en los días del rey israelí David.
Otra mención anterior de la Tanaj habla de los "caídos" (''Nefilím") antes del diluvio, los cuales fueron padres de los famosos dioses y héroes de la mitología.

Enoc, es escritor más antiguo de la historia.
Puede que quien se extienda más en este campo, sea el escriba Enoc (bisabuelo de Noé, quien construyó el arca para sobrevivir al Diluvio) sus libros no constan en la Biblia desde aprox. El año100 d.C. pero son muy esclarecedores en este campo, pues hacen mayor énfasis en l vida de estos gigantes.

Enoc menciona que estos hombres fueron vigilantes venidos del Universo a custodia la Tierra -según los jeroglíficos, ellos construyeron las pirámides de Egipto-, en medio de una gran guerra. Enoc alude a que estos hombres escogieron mujeres de la Tierra para crea una familia a su placer y dejar su rango de soldados para vivir en la Tierra y hacerse los "dioses de la humanidad".

Después de unos 500 años fueron todos capturados y encerrados en Tártaro (un sector debajo de la superficie de la Tierra) y a sus hijos se les dejó que se exterminaran entre ellos mismos por la muerte violenta pues no temían a la muerte y se creían dioses del mundo. Cuando ya casi todos habían muerto, sobrevino un diluvio en toda esa región y sólo quedó de aquella estirpe mitología, leyenda y fábula como los cuentos de Gilgamesh.


1 comentario:

  1. pienso que mientras mas intenten ocultar lo que realmente somos solo lograran acelerar la caída de su propias mentiras la verdad saldrá a la luz, la ciencia es una aberración que se manipula según la conveniencia de quien la utiliza

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